El arquitecto de ALVIBEN Ángel López Martín, en colaboración con Jaume Monferrer i Peña, recogen el encargo de este proyecto, un edificio inacabado debido por la crisis inmobiliaria y ejecutado hasta la cota de planta primera, para rediseñarlo y dirigirlo según los nuevos requisitos propuestos por la propiedad, con viviendas mínimas para familias de dos componentes.
Se trata de un edificio compuesto de un semisótano, planta baja con locales comerciales y 3 alturas destinadas a viviendas, con dos por cada planta. La idea principal es la de crear espacios habitables flexibles, dotando a las viviendas de reducidas dimensiones de la funcionalidad necesaria para el destino al que dedican.